Encuentros con
adolescentes de 20 o más años en psicoterapia. ¿Pueden cambiar la sociedad actual?
Con
esta entrada pretendo que podamos compartir estas reflexiones.
En
nuestra cultura popular occidental
circula una idea sobre las expectativas puestas en los jóvenes como agentes de
cambio de la" sociedad" y se les atribuye una capacidad de cuestionarla y transformarla.
¿A
qué sociedad se refiere esta idea? ¿Tienen los jóvenes adquirida esta
capacidad? ¿Los jóvenes son los que están protagonizando el cambio de la
sociedad actual?
Un
joven es un ser humano, ¿qué es un ser
humano? ¿cómo consigue un ser humano esa transformación personal y social?
Permíteme
hacer una breve referencia a cuatro autores que son referencia importante para
mi en el trabajo como psicoterapeuta. (Para aquellos que hagan una lectura más rápida, pueden continuar en ** más abajo).
Juan
J. Martínez, en el prologo del libro traducido de Michael Eigen. "Locura,
Fe y Transformación", sobre las conferencias del Michael en Seul, presentado
en las Jornadas de Cáceres de 2014, hace
una exposición sobre las características del ser humano. "Para mi un ser humano es un ser que
ante todo, coloca en primer lugar a la verdad, como un principio básico….Tarea
bastante difícil en esta "época" psicopática. ...Ser sensible a la
realidad en general, y a la realidad de los demás en particular…Ser
tolerante…La capacidad y el esfuerzo de pensar los pensamientos. ...Y…la capacidad
y el esfuerzo de pensar los pensamientos
(mentalizar) (pág. 8 - 10).
¿Cuáles
son las características de la sociedad actual? ¿Qué es la verdad?
Joan
Coderch, ya desde el 2001, en "La Relación Paciente - Terapeuta"
plantea la "verdad", y en la conferencia de 2016 en las Jornadas de
Salamanca, vuelve a ser mención: "la verdad es perspectiva, plural,
fragmentada, discontinua, calidoscópica y siempre cambiante (pág. 35)".
Esta conferencia es publicada en el último número de la revista Ceir, vol
11(1), de Febrero de 2017. Y en ella también se menciona otros muchos autores
que abordan el análisis de la sociedad actual: " Z. Bauman, T. Adorno y M.
Horkheimer, G. Lipovetsky, F. Lyotar, F. Sennet y J. Tizón."
¿Qué
esfuerzos son necesarios para transformar la realidad general y particular,
para transformar la sociedad actual? ¿Cómo hacer estos esfuerzos de
transformación?
Michael
Eigen, en Ceir, Vol 8 (1) de Febrero de
2014, en "Entorno al punto de partida de Bion: de la catastrofe a la
fe". En el apartado "Fe en
O" dice:
"Para
Bion, la fe (Fe) es la verdadera respuesta primordial y desarrollada a la
catástrofe. A lo largo de sus escritos, la confianza de Bion es el conocimiento (C) como camino hacia la Verdad disminuyo cada vez más
y busco a tiendas un camino que le permitiese
expresar una concepción más
fundamental. Su afirmación según la cual
la actitud psicoanalítica exige que una se abstenga de esperanzas, del
recuerdo, del deseo y de la comprensión
lo deja a uno sin nada a que aferrarse. El único camino que queda abierto es el
de la fe. " (Fe en O).
"Bion
utiliza el signo “O” para referirse a la realidad emocional del momento o, en
un plano general, para referirse a la realidad esencial como tal. Esta
realidad, en sí, incognoscible, pero el psicoanalista se abre a ella en la fe
de que la encontrara. El psicoanalista aspira a la verdad emocional de una
sesión....Sin embargo, la modificación de la personalidad que tiene lugar en
una trasformación en el nivel del ser y no solo en el del conocer. El sujeto se
reconcilia y se hace uno consigo mismo y con su capacidad de experimentar. Un
resultado paradójico es que la fe afina la precisión en lugar de reducirla. El
contacto con los matices sutiles de la experiencia se profundiza a medidas que
uno desarrolla una sensibilidad atenta que valora lo que permanece fuera de su
alcance. El propio hecho de sentir la experiencia cobra nuevo significado. El sujeto aprende del gesto de comenzar cada
vez desde el principio, de vivir en un momento que no está encerrado entre
paredes y de palpar de manera diferente sus propias paredes."
Por
último, Stephen Mitchell, en "Influencia y autonomía en
psicoanálisis" (1997, 2015).
"Si hay un amplio consenso sobre la
naturaleza interactiva del proceso analítico, existe un acuerdo escaso sobre
cómo el proceso interactivo realmente funciona. Hay muchas ideas diferentes
sobre la interacción en psicoanálisis y poca claridad sobre la relación unas
con otras...Los actuales candidatos psicoanalíticos, luchando para desarrollar
su propio modo de trabajo, enfrentan un abanico de modelos carismáticos de
estilos analíticos afilados por analistas experimentados, pero sin un marco de
trabajo para determinar qué es lo que tienen que hacer con cada uno o una
metodología para desarrollar su enfoque clínico propio. … Un modo de explorar
las diferencias, tanto en la conceptualización de la interacción como en el uso
de estos conceptos como guía clínicas, es considerar la metodología de los
autores analíticos actuales que nos han provisto de relatos extensos y
extremadamente ricos de su trabajo (págs. 214 - 215).
**
Dejamos
como telón de fondo estos autores, sus
teorías y las bases científicas y fundamentos de su experiencias como
profesionales de la salud en su práctica psicoterapéutica.
Voy
a intentar responder a mis propias preguntas a cerca de la idea inicial, y
cuestiones que he ido planteando.
En
nuestra cultura popular occidental
circula una idea sobre las expectativas puestas en los jóvenes como agentes de
cambio de la" sociedad" y se les atribuye una capacidad de cuestionarla y transformarla.
¿A
qué sociedad se refiere esta idea? ¿Tienen los jóvenes adquirida esta
capacidad? ¿Los jóvenes son los que están protagonizando el cambio de la
sociedad actual?
¿Cuáles
son las características de la sociedad actual? ¿Qué es la verdad?
¿Qué
esfuerzos son necesarios para transformar la realidad general y particular,
para transformar la sociedad actual? ¿Cómo hacer estos esfuerzos de
transformación?
Lamento
a veces, mi propio estilo al escribir, pues se me plantea un conflicto entre
las "presiones sociales actuales: sé breve", y las recomendaciones
del tipo de lenguaje periodístico "ser claro, conciso y correcto". No sé si atribuir, este estilo a la propia
sociedad barroca sevillana, o las influencias cervantinas. Nos pedimos disculpas. Al tiempo que noto mi
esfuerzo por poder vencer la propia
"angustia de crecimiento" (Juan J. Martínez, 2017), cuando se trata
de dar un paso adelante hacia lo desconocido, donde uno se expone.
Así
que, vamos a pensar partiendo de los
hechos donde he puesto el foco de atención: "Los jóvenes de la
sociedad actual".
Los
hechos son que tenemos jóvenes viviendo en una sociedad psicopática.
Que
tenemos jóvenes en nuestras respectivas consultas sufriendo los efectos de este
tipo de sociedad. Que somos
psicoterapeutas dispuestos a ayudarles.
En
una sociedad con las característica atribuida por los autores mencionados,
¿quién se atreve a exponerse en un cambio social?
Se
me ocurre, imaginar una situación de guerra silenciosa, por ejemplo, ¿qué haríamos en una
guerra silenciosa?
¿Puede
un ser humano: que busca la verdad, sensible a la realidad de los demás y a la
particular, que tiene en cuenta toda opinión y situación ajena a la propia, y
que se cuestiona la sociedad actual vivir en una sociedad como esta?
Bueno,
si yo fuera el joven que tengo delante como paciente, ¿qué haría? (Es mucho suponer esto, el joven normalmente hablará con el cuerpo, si carece del aparato mental para poder pensar qué hacer).
Tal
vez, en una "guerra silenciosa", me pondría a cubierto de esta
sociedad, no sabría qué hacer. ¿Es esto posible? ¿Dónde me pondría a cubierto?
Hay
productos, que esta sociedad proporciona
para ponerse a cubierto. (Se me
cruza este pensamiento, mientras escribo: una cosa es abusar de ti, no considerandote un ser humano con plenos derechos, y otra es
prescindir de ti, como consumidor, necesario en un sistema donde el dinero te necesita).
Algunos,
ya han adivinado a qué juegan nuestros pacientes cuando se alejan y se ponen a
cubierto de la sociedad esta. ¿A qué juegan? A la guerra, fundamentalmente. A
la guerra virtual. En otras ocasiones, a la "vida cotidiana virtual". Juegan a "lo virtual". No encuentrar sitio en el aspecto real de la sociedad.
¿Qué
pasaría si le quitáramos ese refugio, como proponen algunos educadores y
padres?
Nótese
que el video juego es un refugio virtual dentro de un refugio real, la habitación
de mi cuarto de la casa de mis padres. Un refugio virtual de una "guerra
silenciosa", por ejemplo.
Al
proponer un límite, "prohibir jugar a los video juegos", estamos
desposeyendo al joven de este refugio, de este descanso, …"sacándolos de
un sueño". Quizás para volver a
otro, el de su realidad soñada, de su vivir soñando despierto. Es un círculo
interminable.
Tal
vez la diferencia pueda ser, la sensación de control del video juego, frente a
la incertidumbre que le plantea la vida cotidiana.
¿Cómo
enfrentar la incertidumbre de la vida cotidiana?
No
conozco otro modo que el mentalizar, -pensar los pensamientos dice Bion-, de los hechos de mi vida cotidiana. Y añado,
con el fin de contactar con la realidad, mi realidad, de dentro y de fuera, la
mía. La realidad que me estoy labrando, para saber la realidad que me quiero
labrar.
Esto
es distinto de "rayarse" (freak* out), "darle vueltas y
vueltas". (*freaky : raro).
Fonagy y otros llaman a este funcionamiento
psíquico "sobrementalizar".
Tampoco
se trata de buscar respuestas para todo, o acceder a un conocimiento
enciclopédico, base de las enseñanzas académicas más tradicionales. Es decir,
no se trata de "reducir la incertidumbre" mediante la información
descontextualizada.
¿De
qué se trata entonces?
Se
trata de "convivir con la incertidumbre". Para ello el "pensar" o mentalizar,
tiene una característica principal, que
"a este tipo de pensar, te tienen que enseñar". ¿Y cómo es este
pensar distinto?
- Se piensa en compañía, el
pensamiento surge de una relación que se va haciendo íntima, es una
creación artesanal, una enseñanza -aprendizaje entre artesano y aprendiz
de artesano.
- Se exploran todos los aspectos de la vida cotidiana actuales,
los contenidos psicológicos (los pensamientos, los sentimientos, los
recuerdos…) están en un contexto de la realidad de la vida cotidiana.
- El modo en que se piensa es
detenido, sutil, acompasado, es un momento de relación en el que la atención es
"plena", donde se establece un juego mutuo.
- Es un sendero sinfónico,
donde los diferentes sistemas mentales a modo de instrumentos de una orquestas
sinfónica entran en acción, donde
el director de orquesta son los acontecimientos de la vida real, y donde las partituras son aquellos modelos operativos internos que aprendimos en relaciones pasadas y que pueden valer o no para las presentes.
En
la vida cotidiana, hay situaciones que dependen de mi participación, y puedo
elegir en una dirección -aunque sin
saber las consecuencias a ciencia cierta , sólo probable, sólo con cierta
certeza, y por tanto conviviendo con la incertidumbre-. En cambio hay situaciones que no depende de
mi. Y mentalizar esta diferenciación forma parte de la organización mental que
surge en la relación terapéutica.
¿Se
ha entendido esto? Voy a intentar decirlo de un modo distinto.
¿Por
qué no nos han enseñado a pensar (mentalizar)?
Mi
hipótesis, basada en mi relación con los autores mencionados y con los
pacientes jóvenes y mayores, es que "mentalizar o pensar ocurre en una
relación, en una relación donde nos enseñen a mentalizar". Esta capacidad
no la tienen los jóvenes hasta que no se las enseñamos.
No
podemos enseñar esta capacidad quienes no la tienen adquirida.
Por
si no ha quedado claro, conciso o correcto. Voy a ser breve: pensar no es darle
vuelta a las cosas. Porque de darle vuelta a algo no resulta nada nuevo. Pensar
es relacional, y de ese pensar en una relación (mentalizar) resulta algo nuevo,
una relación nueva cercana donde poder pensar sobre mi realidad general (mi
sociedad) y sobre la realidad particular (mi vida en esta sociedad).
¿Qué
conclusión sacamos de esta reflexión?
Algunos jóvenes no pueden cambiar la sociedad actual,
porque no les estamos enseñando a
desenvolverse, cuestionarse y situarse para sobrevivir en una sociedad como la
nuestra. Situarse en una "realidad virtual o freaky" no es lo mismo,
aunque les aporta un refugio a este "no tener un lugar donde poder
aterrizar".
Hay
algunos jóvenes que siguen luchando (avanzando) en esta "guerra silenciosa", son
aquellos que se abren paso y acuden a
nuestras consultas porque ya han probado el refugio del hogar y el virtual, la
medicina, legal o ilegal, ya les han hecho pruebas físicas y psicológicas, etc.
y buscan una oportunidad real. La vida que llevan dentro sigue explorando y
buscando ayuda.
Estos
jóvenes afortunados, que han tenido apoyo de sus padres (o tutores legales), y
han tenido como aliado "silencioso" la propia naturaleza de la mente
humana, que afortunadamente, ha reaccionado con ansiedad, angustia y todo tipo
de reacciones emocionales. Han gritado a su manera, la naturaleza humana porque
la vida y el futuro que estos jóvenes representan en nuestra cultura, se abra
paso, con el aliado del sufrimiento, para llegar a estar completos como seres
humanos, como seres humanos que piensan en una relación. En una relación que
les haga pensar. Pensar su verdad. Pensar
nuestra verdad compartida o no, y respetada. Algo, que parece ser no han
encontrado aún.
Para
mi, para mi verdad, esta es una lucha que ellos y nosotros estamos llevando a cabo, meritoria lucha. Mayores y
jóvenes. Pero en esta sociedad, esta lucha es silenciosa. Y no se ve en las
noticias de la sociedad psicopática. Si de algo sirve a otros colegas y
sufridores, doy fe, de esta verdad, que ocurre en la intimidad de nuestras
consultas. Creo que trabajamos en las "catacumbas" de esta sociedad.
Tal vez los expertos en historia de la humanidad puede que intente prever algún desenlace. O
puede que la evolución del ser humano, nadie la sepa. Pero creo que la lucha
por sobrevivir del ser humano, y por ser seres humanos, en esta sociedad actual
y global pasa por enseñar a pensar en la intimidad, por ser tolerantes con
todas las ideas y teoría del otro, por ser sensibles al mundo que nos rodea y
en el que estamos inmerso, y por acercarnos a "O". A ser un "ser humano se aprende si
alguien nos lo enseña".
Por
terminar, de alguna forma, algunas curiosidades:
Es
una coincidencia que en hebreo Sablanut (tolerancia) y Sablet (sufrimiento)
tienen el mismo origen.
También que "las células de la piel y las
neuronas", tanto es así que los investigadores de Stanford han conseguido
transformar las primeras en las segundas.
La
tolerancia habitualmente está referida en nuestra sociedad occidental al
respeto por las leyes. En cambio, tiene un aspecto muy importante que
es la tolerancia es referida a otro ser
humano.
La
mente es el flujo de energía e información que emerge de las relaciones íntimas
de nuestra sociedad y trae una enorme satisfacción para los ser seres humanos
lo más saludables e integrados posibles, que hagan emerger una sociedad
distinta, pero esto lleva su tiempo, esfuerzo y quién sabe qué…un poco de Fe en
O.
¿Pueden cambiar los jóvenes la sociedad actual?
Si, si les ayudamos a pensar en su vida.