En innumerables
ocasiones hablamos de "pensar"
cómo de un acto habitual, algo que todo el mundo puede hacer. Si planteo qué es pensar, muchos de ustedes
me dirán que "es darle vuelta s a un problema". ¿Podemos llamar a eso
"pensar"?.
Otros muchos me
podrían responder "que no hay que pensar tanto", como si hubiese una
consecuencia negativa en el hecho de hacerlo.
Otros tienen pensamientos del tipo "me va mejor si no lo
pienso" .*
*(Una posición no
muy nueva en mi opinión, que me recuerda
a Epicuro. Deseo suerte a los que
se enfrenten al autogobierno, la autosuficiencia, y la indiferencia, y a los
miedos derivados de esta).
Tanto los
partidarios de pensar como algo positivo que permite resolver problemas, como
algo negativo o neutro que es mejor
evitar, en ambos casos no hay una definición de lo que es "pensar".
El modernismo fundó
sus bases en los presupuestos cartesianos como un modo de cambiar las creencias
preestablecidas, así el "pienso,
luego existo", se instituyó en un presupuesto admitido por las sociedades
modernas occidentales. En mi opinión, aquí "el pienso" se llamó a
"tener un pensamiento", como decía René, decía algo así cómo, dudar
es un pensamiento, luego puedo demostrar su existencia.
Desde esta
perspectiva se podría entender que todas las producciones mentales, como los
pensamientos, los sentimientos, los recuerdos, los sueños, las percepciones,
las sensaciones…son pensar.
Para mi y otros
autores, Bion y mis compañeros de psicología relacional, una cosa son los
pensamientos y otras es pensar (Bión: "pensar los pensamientos").
Vamos a intentar
poner una situación que esclarezca esto. Imaginemos un pensamiento que aún no
tenemos (pensar es distinto de pensamiento). Este es un pensamiento que expongo
aquí, y que al leerlo puedes tenerlo, pero si no lees esto, este pensamiento, es
muy probable que no hubiese ocurrido antes de leer esto. Ya tienes el
pensamiento (pensar es distinto de pensamiento), pero ¿puedes pensar esto? ¿has
hecho tuyo este pensamiento? ¿lo has comprendido? ¿ha cambiado tu vida una vez
que has comprendido este pensamiento?
Es muy probable que
no lo hayas entendido. No te preocupes,
no es fácil pensarlo. Lo que apoya la idea de que
"el pensar es un proceso que se aprende en un contexto". Como en todo aprendizaje, no es algo con lo
que se nace, es algo que se adquiere si otro nos lo enseña, y como en todo
aprendizaje, no es algo que se adquiera en un razonamiento teórico -
memorístico - mimético. Es algo que requiere una profundización entre un
maestro y un alumno. Por eso, no es fácil ni explicarlo ni entenderlo a través
de este medio. Cómo todo aprendizaje, requiere un curso, una formación, unas
clases, en definitiva, una experiencia de enseñanza-aprendizaje para poder
comprender que es pensar.
Pese a que hemos
topado con la realidad, que requiere un
esfuerzo por tener un tipo de
experiencia donde poder a prender a pensar
nuestros pensamientos, nuestros sentimientos, nuestros funcionamientos
mentales, nuestras relaciones, nuestras sensaciones, el modo en que regulamos
nuestra energía…y cuando nos sale bien y cuando nos sale mal, y por qué con
unas personas nos sale bien, y con otras no, o por qué con las mismas personas
en diferentes momentos y situaciones es diferente.
¿Qué justifica
asistir a un "curso" de estos?
Fundamentalmente,
hay varios beneficios al "aprender a pensar" (nuestros pensamientos,
y nuestra vida en general).
Nos ayudará a poder tener una consciencia más amplia de cómo
intervenimos en lo que nos sucede en la relación con otros y conmigo. Evitará
sentirnos inseguros al no saber por qué nos sucede lo que nos sucede, al tiempo
que nos hará sentirnos más seguros al tomas
decisiones más realistas. Podemos identificar y satisfacer de un modo más óptimo posible las necesidades que
tenemos como seres humanos (de cobijo, nutrición, sexo, ejercicio, descanso,
trabajo, etc.), al tiempo que podemos
evitar los sentimientos de insatisfacción derivados de la no satisfacción de
las mismas. Por último, uno de los
beneficios más importante para los seres humanos, es mejorar la
capacidad de conectar con otros seres humanos de una manera respetuosa,
diferenciada y madura, lo que nos hace compartir las necesidades en
compañía, creando una armonía en las relaciones de intimidad que nos hace menos
vulnerable frente a las adversidades, y de este modo poder elegir aquellas
relaciones que estén en sintonía con nosotros y prevenir así el no elegir
relaciones que nos puedan ser perjudiciales, o nos parecen serlo.
En síntesis, en mi
opinión pensar (como distinto de tener pensamientos) es un proceso que se consigue con esfuerzo en una experiencia de
enseñanza-aprendizaje de tu propia vida.
"Aprendo
a pensar, luego vivo mejor".
¡Un afectuoso saludo
a tod@s!
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